ÍTACA

Autor: José Antonio Gutiérrez Alcoba Llegado el día, Icario, su esposa Anfitea junto a sus hijas Penélope e Íftima con modesto séquito portando comedidas dotes, arribaron a la mansión de alta techumbre y pronto al palacio de espacioso pavimento llegaron invitados desembarcados de veleras naves después de atravesar el anchuroso Ponto cargados con ricos presentes. Laertes y Anticlea, ilustres anfitriones, les dieron lugar en amplias moradas poniendo a sus órdenes moderada servidumbre dirigida por su hija menor Ctímene y por Euriclea, esclava adquirida para su hijo por Laertes. Vinieron por mar y por tierra, y durante tres días que duró la boda, la adusta ciudad se llenó de tumultuosa alegría, los aedos traídos por los visitantes organizaron certámenes musicales en el lugar reservado a los oradores se organizó una procesión ceremonial para vestir a la deidad de ojos de lechuza con un peplo bordado en hilo de lino. El don de Dionisos corrió en abundancia por tus ...